Desde hace unos meses ha estado rodando por las redes sociales una serie de imágenes grotescas que mostraba a varias personas "disfrutando" de una sopa de fetos humanos y hiervas aromáticas. La reacción no se hizo esperar y la ciudad de la provincia sureña de Cantón, en Guangdong, China, ahora se encuentra bajo la lupa. Los chinos se caracterizan por sus estupendas y magníficas edificaciones, su modo científico en tecnología de punta, sus modales, su rica cultura y su paladar exótico que incluye gusanos fritos, rata asada, filete de serpiente en salsa, etc. Pero en este caso, la situación va más allá.
Lo de los fetos no es algo reciente, en mayo del año 2012, salio a la luz pública una polémica noticia que involucraba unas pastillas de vitaminas que fueron incautadas en Corea del Sur procedentes de China en las que, luego de su posterior y respectivo análisis en Pekín, se encontraron restos de fetos y bebes fallecidos que habían sido disecados para luego ser molidos y pulverizados para el proceso de formación de dichas pastillas. Desde ese entonces y lo que restó de ese año, se decomisaron casi 20 mil pastillas en donde se siguieron detectando la presencia de carne humana pulverizada y según las versiones, dichas cápsulas serían comercializadas como un complemento vitamínico con el objetivo de curar enfermedades o de adquirir potencia sexual. La actividad con ese tipo de material, al parecer, continuo en el mercado.
A pesar de los controles, el comercio de fetos y bebes muertos se ha convertido en todo un negocio lucrativo en el mercado negro de China, a pesar que la normativa indica que deben de incinerarse. Hay que tener en consideración que hay muchos fetos y bebes muertos por la política de hijo único, es decir, un solo hijo por unidad familiar para evitar la pobrepoblación en el país. Estos crímenes aumentan por el hecho de que la mayoría de los chinos prefieren tener hijos varones y las familias pobres terminan vendiendo sus bebés de sexo femenino, por ello, se formó un mercado de abortos en el bajo mundo de las regiones, donde algunas compañías se dirigen para buscar carne de feto para la fabricación de colágeno.
Un ciudadano de 32 años llamado Zhu Yu, natural de Shanghai, fue denominado "artista" por el hecho de comer fetos humanos, tenía un modo de operación rutinario desagradable y malévolo. Como cualquier otro ciudadano, se encontraba amparado bajo la ley de hijo único en China así que, de común acuerdo con su novia, ésta quedaba en estado y, a unos cuantos meses de embarazo, se practicaba un aborto. Burlaban a los controles con pagos bajo la mesa y los fetos iban a dar un lugar alejado, en donde el horno microondas hacía su trabajo de rostizarlos para que finalmente, la pareja se lo comiera.
El procedimiento fue realizado en nueve oportunidades y, según Zhu Yu, la carne era muy sabrosa, muy tierna que siempre mantenía un sabor especial y diferente a cualquier otra carne.
El procedimiento fue realizado en nueve oportunidades y, según Zhu Yu, la carne era muy sabrosa, muy tierna que siempre mantenía un sabor especial y diferente a cualquier otra carne.
«Arte Extremo», como se le dio a conocer en China, es la última forma de expresión radical para una nueva generación de creadores que han surgido de la sombra de la censura comunista con el lema de «No hay límites». Desde el año 2015, Zhu Yu, tiene una exhibición en Shanghai, donde prepara con mantel y cubiertos incluidos, un banquete donde yace un feto cocinado a la parrilla, o una sopa de fetos sazonado con carne de pollo hervido por ocho horas con costosas hierbas aromáticas.
"Sé que hay gente que no cree que el bebé sea real, pero lo es. Me lo llevé de un colegio médico" asegura Zhu Yu, con cara risueña cuando ponen en duda la veracidad de su "espectáculo". Pero no solo eso, la segunda parte del banquete incluye un platillo que sirve de postre llamado «cerebro humano enlatado», donde hay sesos humanos en recipientes que se pueden comer como si fuera mermelada.
"Sé que hay gente que no cree que el bebé sea real, pero lo es. Me lo llevé de un colegio médico" asegura Zhu Yu, con cara risueña cuando ponen en duda la veracidad de su "espectáculo". Pero no solo eso, la segunda parte del banquete incluye un platillo que sirve de postre llamado «cerebro humano enlatado», donde hay sesos humanos en recipientes que se pueden comer como si fuera mermelada.
La historia de el "arte" de Zhu Yu, comenzó en el año 2000, en un festival de arte marginal de Shanghai. Allí presentó una “obra” titulada “Comiendo gente” en la que pretendía provocar a los espectadores con imágenes duras. En las fotografías aparecía él mismo con un plato de carne asada (posiblemente pato o pollo) al que le había añadido la cabeza de una muñeca, representando un acto de canibalismo en el que comía un feto.
Las fotos eran tan provocadoras que fueron rechazadas por los responsables de la Bienal de Arte de Shanghai de aquel año, por lo que Zhu Yu las expuso en uno con menos escrúpulos.
Las fotos eran tan provocadoras que fueron rechazadas por los responsables de la Bienal de Arte de Shanghai de aquel año, por lo que Zhu Yu las expuso en uno con menos escrúpulos.
El costo de este platillo es de unos 4000$ y por mucho tiempo, fue la comida de moda en Taiwán. Los bebés muertos se pueden comprar en los hospitales regionales por unos 50 o 70$ para satisfacer la gran demanda que hay, y los amantes de la carne de feto los compraba para prepararlos a la parrilla o a la barbacoa.
Su ingesta, se cree, que beneficia la salud, quita las enfermedades terminales, cura enfermedades incurables y mejora la potencia sexual. Uno de los clientes habituales era un hombre de 62 años que, al parecer, tenía sexo todos los días con su segunda esposa, una joven de 19 años.
Su ingesta, se cree, que beneficia la salud, quita las enfermedades terminales, cura enfermedades incurables y mejora la potencia sexual. Uno de los clientes habituales era un hombre de 62 años que, al parecer, tenía sexo todos los días con su segunda esposa, una joven de 19 años.
Una de las anécdotas cuenta que una pareja de una ciudad cercana que ya tenía dos hijas, decidieron abortar después de recibir la confirmación de que se trataba de otra niña. El bebé tenía un tiempo de cinco meses, y en el mercado negro, los bebés que están cerca a nacer y morir naturalmente, cuestan unos 2000 yuanes, y los bebés abortados cuestan 600 yuanes. Las parejas que no quieren vender los bebés muertos pueden vender las placentas por 85 yuanes máximo.
Estos fetos no solo son considerados como un tipo de alimento beneficioso para la salud, sino también son tomados como amuletos para la buena fortuna. En este caso, los fetos son disecados por encargo para ser revestido con pan de oro y para ello, el aborto no se lleva a cabo triturando al feto en la matriz de la mujer, sino que se extrae de forma quirúrgica. Posteriormente se diseca para proseguir con rituales mágico realizados por algún chamán y luego bañado en pan de oro. Este tipo de fetos son llamados "Kuman Thong" o "Bebé Dorado", y son capaces de atraer la buena suerte. Se deben exhibir en algún lugar especial de la casa o, en caso de no exhibirse, guardarse en algún lugar especial, donde su dueño deberá profesarles veneración y devoción.
Indignado, el Gobierno chino ha prohibido los trabajos artísticos sangrientos, eróticos o violentos. El Ministerio de Cultura ha amenazado con penas de tres años de cárcel a los transgresores, una condena que se podría ampliar a 10 años en el caso de quienes utilicen animales o humanos -vivos o muertos-, asegurando que "ese tipo de trabajo amenaza la salud mental y física, tanto del individuo como del público." La primera consecuencia negativa de las actuaciones de Zhu Yu ha sido la propagación en medio mundo del falso rumor que asegura que el canibalismo de bebés muertos es una práctica habitual en Taiwan y China. En marzo de 2001, una revista sensacionalista de Malasia llegó a asegurar que en algunos restaurantes de Taipei se servía habitualmente carne de bebés muertos.
Para terminar dicha entrada es importante mencionar y recordar que antes, durante las guerras, a falta de comida, muchos practicaban el canibalismo para no morir de hambre, era eso o morir. Los enemigos muertos en el campo de batalla o la carne de compañeros heridos o seleccionados al azar para ser la comida, eran devorados. Se cuenta que tenía un sabor similar a la carne de cerdo o de vaca. La cosa radica en que, según las enseñanzas inculcadas, todo tema relacionado a comernos a nosotros mismos es un tabú.
"Ninguna religión prohíbe el canibalismo. Ninguna ley dice que no se pueda comer carne humana. He aprovechado ese espacio vacío entre la moral y la legalidad para desarrollar mi trabajo. Lo hice por amor al arte."
Zhu Yu
Si esto es cierto es tal el grado de depravacion repugnancia habria que ejecutar a estas personas dan asco
ResponderBorrar¡Claro que es cierto amigo Jorge, por esa razón es una noticia alarmante, cruel y depravada! Recuerda que las costumbres de alimentación en algunos platillos en China son variadas, desde insectos y ratas hasta perros y gatos. ¡Saludos y gracias por comentar!
BorrarQue pedo, los chinos estan locos
ResponderBorrarDios... que miedo... esa gente esta completamente loca.. que sociedad tan llena de aberraciones..
ResponderBorrarSI ACASO ES REAL ESTA HISTORIA, QUE TRISTEZA, QUE COMO DICE LA BIBLIA NO TENGAN AMOR POR EL FRUTO DEL VIENTRE. Y TANTAS PAREJAS QUE ANHELAN UN BEBÉ.😥
ResponderBorrarNECESITAN ARREPENTIRSE
No estoy apoyando a este tipo pero, si nosotros comemos ternera( que es el bebé de la cabra) el no puede comer fetos? Osea estoy en contra de este acto repulsivo pero es inaceptable
ResponderBorrarDe la vaca subnormal
BorrarBueno o malo sera definido con la perspectiva que se mire.
ResponderBorrarComemos pollo, vaca, huevos, mariscos, venado, pavo, conejo, etc., etc.
Total, humana o animal, vida es vida. O no?
¿Tienes la costumbre de compararte con animales o solo estás tratando de abrir la Ventana de Overton para justificar el canibalismo? No se entiende mucho tu postura.
BorrarGente puerca ojalá ya no vinieran a México porque ponen negocios y nos pueden vender porquerías que están acostumbrados a comer ellos que tal la comida china, ya no podemos en ellos
ResponderBorrarEsto que he visto y leído es la cosa más asquerosa de la vida.es cierto que hay que respetar las costumbres de cada cual,pero es esto es pasarse,es grotesco e inhumano.las personas cuando viven sin príncios y sin límites no valen nada.
ResponderBorrarDas el peor de los ascos hijo de tu purísima madre basura el error humano eso eres fiasco basura
ResponderBorrarEso es asqueroso repulsivo inhumano. Ningún ser humano normal haría tal acto como este.
ResponderBorrarDan asco estos chinos d mierda
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