"El universo es una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna."
Blaise Pascal
El Universo. Ese lugar fuera de nuestro planeta que representa la totalidad de tiempo y espacio en todas las formas de la materia, energía, etc. Ese sitio vasto que, en su sentido más general, es el conjunto de todo lo existente, siendo en donde se inició la creación de todo. La vista desde los transbordadores y sondas espaciales han dejado ver imágenes asombrosas sobre la extensión cósmica que hacen suponer que el Universo no tiene límite, o al menos no uno que se encuentre cercano a nuestro planeta. Pero resulta que, recientemente, en el mes de marzo de 2019 específicamente, la NASA descubrió un muro en nuestra galaxia que impide ver más allá.
¿El Universo no es infinito? ¿Se podría ver el fin de nuestro sistema solar? Muchas son las preguntas que surgen con este nuevo descubrimiento.
El muro está formado por moléculas de hidrógeno y sería la frontera de nuestra galaxia con el resto. A ésto se le conoce como heliósfera y se forma cuando átomos de hidrógeno sin cargar chocan con átomos cargados por el viento solar, formando helio ovalado. El Sol dispara con partículas cargadas que, al contactar con las partículas de hidrógeno entre planetas, hace que emitan luz ultravioleta. Con el tiempo, la velocidad de estas partículas solares disminuye al enfrentarse al medio interestelar local. Como consecuencia de ello, las partículas solares se acumulan en esta frontera arbitraria, donde se calientan, se comprimen y cambian su campo magnético. Es así como se ilumina el "muro de hidrógeno".
Esto es algo que los astrofísicos ya conocían en teoría, pero nunca habían observado hasta ahora. La NASA explicó que el muro fue alcanzado por las naves Voyager 1 y 2, y tardaron 35 y 41 años respectivamente en llegar. Dichas naves fueron las las primeras en alcanzar el muro y salir de él. Es importante destacar que una de las naves tiene un espectómetro de radiación ultravioleta y permitió tomar algunas imágenes del muro.
Según los científicos, para confirmar la teoría, las naves deben atravesar ese muro para seguir tomando imágenes. Así podrán descubrir el alcance de la influencia solar. Si el espectómetro detecta una reducción de partículas visibles significa que la influencia del Sol acaba, pero si continúa, podría significar que existe una influencia superior de la que se consideraba al principio, pudiendo ser algo que se encuentra expulsando tanta energía que afecta hasta nuestro sistema solar.
El descubrimiento podrá permitir avanzar en la extensión cósmica, pudiendo tener otras imágenes del Universo, encontrar nuevas galaxias y de ser posible, encontrar vida alienígena.
De igual manera, astrónomos del Instituto de Astrofísica de las Islas Canarias, en España, descubrieron un objeto que sería la cosa de mayor tamaño de todo el universo: el Gran Muro BOSS. Una superestructura de 830 galaxias que se encuentra a 1.000 millones de años luz de distancia y con una masa posible 10.000 veces superior a la de la Vía Láctea.
El equipo de investigadores ha encontrado el Gran Muro mientras buscaba galaxias agrupadas en una zona comprendida entre 4.500 y 6.400 millones de años luz de distancia. Las galaxias se agrupan en racimos que forman superestructuras, se unen y constituyen líneas denominadas muros, que rodean los espacios vacíos del universo. Un ejemplo de ello son el Gran Muro Sloan y Laniakea, el cúmulo de galaxias al que pertenece la Vía Láctea. Sin embargo, el Gran Muro BOSS es dos tercios más grande que cualquiera de ellos y está formado por un número de galaxias cinco veces superior.
Como dato curioso, NGC 6052 es un par de galaxias en colisión. Fueron descubiertos por primera vez en 1784 por William Herschel y originalmente se clasificaron como una sola galaxia irregular debido a su forma extraña. Sin embargo, ahora sabemos que NGC 6052 en realidad consiste en dos galaxias que están en proceso de colisión y hace mucho tiempo, la gravedad las unió las dos galaxias al estado caótico que se encuentran. Las estrellas de las dos galaxias originales ahora siguen nuevas trayectorias causadas por los nuevos efectos gravitacionales.
Sin embargo, las colisiones reales entre las estrellas son muy raras ya que las estrellas son muy pequeñas en relación con las distancias entre ellas (la mayor parte de una galaxia es un espacio vacío). Finalmente, las galaxias se fusionarán completamente para formar una galaxia única y estable. Nuestra propia galaxia, la Vía Láctea, sufrirá una colisión similar en el futuro con nuestro vecino galáctico más cercano, la galaxia de Andrómeda. Sin embargo, no se espera que esto suceda durante unos 4 mil millones de años.
"El universo es una red de cúmulos gigantes de la materia que rodean huecos vacíos, y sobre él, existen dos posibilidades: que estemos solos en el Universo, o que estemos acompañados. Ambas posibilidades son igualmente aterradoras."