miércoles, 1 de septiembre de 2021

La Esfera de Betz - Un objeto de otro mundo

En este mundo hay objetos rodeados de misterios, como por ejemplo; Las Tuberías de Baigong, Las Máscaras de Plomo, El Caballero Negro, por mencionar algunos, cuya respuesta de su razón de existencia o funcionamiento va más allá de las fronteras. Sin embargo, algunos de estos raros dispositivos han sido divisados, inspeccionados y detallados, para arrojar un veredicto a la población, son de origen alienígena. Los temas OVNIS son de gran renombre y fama por las continuas teorías que surgen sobre conspiraciones gubernamentales involucradas en encubrir entidades de otras dimensiones, galaxias y planetas. Puede que sea de ese modo y que estos extraños objetos posean un gran poder y están fuera del conocimiento de estos entes gubernamentales, pero cuando sepan de su existencia, lo obtendrán para experimentos. Tu tienes el veredicto. 

La familia Betz vivía en Fort George Island, Florida en 1974. La familia estaba compuesta por Antonie, un ingeniero naval, su esposa Gerri, una ama de casa, el hijo mayor Terry Mathew, de veintiún años de edad y estudiante de medicina, y Wayne, de doce años. A mediados del mes de marzo de ese año, un incendio cerca de su propiedad se extendió a través de ochenta y ocho hectáreas del bosque pantanoso Fort George Island, situado al este de Jacksonville, Florida. El 26 de marzo, la familia encontró algo extraño en el área que había sido consumida por el fuego: Una esfera de metal perfectamente pulida de aproximadamente ocho pulgadas de diámetro (alrededor de 20.32 centímetros). El objeto metálico además, pesaba diez kilogramos y tenía en uno de sus lados un símbolo en forma de triángulo. Lo más raro del asunto era que la familia Betz llegó a afirmar que la esfera actuaba con voluntad propia; se movía de un lugar a otro, vibraba a baja frecuencia y hacia ruidos similares a una campana.

Inicialmente ellos pensaron que el objeto era una antigua bala de cañón de los colonizadores españoles de la era del Renacimiento en Florida, pero la esfera se encontraba limpia y brillante, sin mostrar ningún tipo de corrosión.  De haber sido una pieza de armamento del período colonial español, algo que para empezar no usaban los misioneros de Florida, habría sido de hierro o piedra, no de acero inoxidable o plata. Los ruidos y movimientos comenzaron cuando la familia decidió transportar la esfera a su casa. El extraño comportamiento que hacía los sorprendió asustó.

Terry descubrió que la esfera reaccionaba al sonido, por lo que al tocar su guitarra o dar un martillazo, el objeto hacía un ruido punzante. Los miembros de la familia decidieron hacer un experimento con la esfera al rodarla hacia ellos por el suelo, pero el objeto parecía tener vida propia y cambiaba de dirección a mitad de camino y volvía a la persona que la había hecho rodar. La familia Betz tenía un perro que se asustaba del objeto. Cuando le acercaron un poco la esfera, éste empezó a lloriquear y a taparse los oídos con las patas. La familia notó también que cuando el sol brillaba con fuerza o era expuesta a rayos ultravioletas, la esfera se movía con más intensidad, por lo que sospecharon que las radiaciones solares afectaban el objeto.

La familia decidió reportar a los medios su extraño descubrimiento, y así lo hicieron el 10 de abril del mismo año. Algunos importantes periódicos americanos se interesaron y fueron a ver si se trataba de algo verídico el 12 de abril. Pronto, el ejercito de los Estados Unidos se interesó también en la esfera, así que se aproximaron al lugar para analizarla y obtener más respuestas. Para ello, varios expertos y especialistas fueron llamados para poder ayudar en el procedimiento. Un experto de una empresa de investigación de Baton Rouge, Louisiana, examinó la esfera, y dictaminó que de ella salían ondas de radio y existía un campo magnético a su alrededor. Finalmente, la Armada Norteamericana analizó la esfera en la Estación Aérea Naval de Jacksonville en donde, en sus primeros intentos, usaron Rayos X pero fallaron en su análisis ya que la máquina no era lo suficientemente fuerte para penetrar el acero, pero dos pruebas posteriores mostraron el contenido del objeto. Pero no esa información se mantuvo clasificada. Solo se indicó de manera pública que tenía una composición de acero inoxidable de alta calidad y otros metales magnéticos.

Finalmente, un portavoz del ejército manifestó: "No sé quién la fabricó, pero creo que proviene de la Tierra. Sabemos que no es un explosivo y no presenta ningún peligro." La familia Betz envió la esfera al astrónomo y renombrado ufólogo J. Allen Hynek para que la examinara. Éste estuvo de acuerdo con que el objeto había sido hecho por el hombre y que en su interior no se encontraba nada fuera de lo común. En el año 2012, el conocido podcast Mysterious Universe le dio el título "Artefacto alienígena o dispositivo del Día del Juicio Final", donde hablaron y dieron a conocer las posibles explicaciones defendidas por los creyentes.

Las explicaciones sobre la misteriosa Esfera de Betz eran diversas e ingeniosas y diariamente aparecían teorías al respecto. Un científico dijo que estaba hecha de acero tipo 431 del siglo XVI, chapada en plata. Otros decían que era un improbable satélite de metal sólido o una sonda extraterrestre con dispositivos antigravedad. Unos señalaron que podría tratarse de una pieza de la obra perdida del artista y escultor James Durling-Jones, que viajaba por la zona al momento del incendio y había perdido unas piezas de su arte algo similares. Pocos manifestaron, después de un estudio en el año 2012, que era una válvula de retención de una fabrica de papel o una pieza en stock de Bell & Howell, una empresa de suministro de equipos de Jacksonville. El presidente de esa compañía, Robert Edwards, mostró una bola de acero inoxidable de  que medía algo más de veinte centímetros y pesaba casi diez kilogramos. A pesar de su parecido, variaba en color y textura, además, era un objeto que la empresas de suministros no había vendido antes, al menos en ese particular modelo.

La esfera fue examinada y analizada a profundidad por el metalúrgico Fred Thomas. Él manifestó que el objeto metálico era asombroso por su textura de calidad y peso pero que se encontraba hueco. La familia Betz acusó a los militares de haber encontrado algo en el interior de la esfera pero nunca se dio a conocer más. Luego, un informante anónimo dijo que antes de acceder al interior del objeto, la marca triangular en el exterior había cambiado a un color dorado rojizo, alterando la textura de la esfera, mostrado en su interior dos objetos rodeados por un halo plateado con cuatro polos magnéticos, un par positivo y otro par negativo.

Para calmar las masas que indicaban que los militares tenían en su poder lo encontrado dentro de la misteriosa esfera metálica, un representante de la Armada de los Estados Unidos afirmó que la esfera era solo un objeto metálico común pulido y que la razón de su movimiento era por la construcción de la casa de la familia Betz, que además de ser antigua, tenía pisos de piedra irregulares. El objeto, al ser casi perfectamente equilibrado, solo necesitaba una pequeña hendidura para que se moviera o cambiara de dirección. Esa declaración para muchos fue una respuesta descarada para tratar de ocultar lo que no se podía por lo que hubo más polémica.

Así pues, entró en escena el doctor James Albert Harder, profesor de ingeniería civil e hidráulica de la Universidad de California en Berkeley. Indicó que quedó muy intrigado con los reportes respecto a la esfera y pidió que se le diera una oportunidad de examinar el objeto con sus propias manos. Muchos dicen que su aparición se debe a que el gobierno lo contrato por un precio alto para que dijera públicamente algo que calmara a la gente. El 24 de agosto de 1974, se celebró el Congreso Internacional de Ufología, en Chicago. Allí Albert Harder presentó conclusiones verdaderamente sorprendentes, y totalmente terribles, que afirmaban que había hecho estudios por medios de Rayos X y que dentro de la esfera se encontraban dos esferas internas estaban hechas de un elemento mucho más pesado que cualquier cosa conocida por la ciencia. "Si se intenta dividir la esfera, podría haber una explosión similar a una bomba atómica." alertó el profesor.

La familia Betz se quedó con la esfera metálica pero pronto, algo pareció perturbarlos. Desaparecieron del ojo público, vendieron su propiedad y se mudaron a otro estado. Lo último que se supo de los Betz fue a mediados de diciembre de del año 1987, cuando Antoine Betz falleció a los 67 años.

Hay que ser racionales y sinceros. Dicha esfera emitía vibraciones de alta frecuencia, sonidos similares a una campana y se movía en direcciones contrarias cuando la lanzaban en el piso. Desde el anuncio a los medios de la familia Betz, varios periodistas presenciaron los acontecimientos inexplicables que el objeto provocaba. Cabe destacar el comportamiento del perro de la familia ante el efecto de la esfera. Puede que dicho artefacto no se trataba de una bomba o emitía alguna radiación. Puede que no haya sido peligroso, sino se le provocaba, pero lo cierto es que los militares encontraron algo en su interior y lo tomaron para su gobierno. Solo ellos saben que era y para que lo usaron posteriormente.

3 comentarios:

  1. Me encanta el contenido que has subido de verdad que es interesante y entretenido, muchas felicidades y mis respetos y admiración por todo el arduo trabajo que me imagino ha sido el subir todo este contenido , saludos 🤗

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    1. Querida Lectora Xuxu saludos primeramente para ti. Muy agradecido por tu comentario, en verdad que sí. Me hace sentir agradecido y animado a continuar publicando contenido en este humilde y muy querido espacio. Bienvenida eres a continuar leyendo futuras publicaciones. Saludos y bendiciones, un abrazo.

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  2. Quedé con la intriga de que elemento transuranico eran las otras 2 esferas pequeñas, por qué si fuera así que dicen que elemento 141 o 150 teóricamente si se usara para el núcleo de una bomba atómica podría destruir el mundo

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