viernes, 11 de diciembre de 2020

La pequeña cabra en el columpio

El presente año 2020 ha sido uno que más cambios a generado en el planeta. La Pandemia y la cuarentena ha ocasionado una drástica alteración en el ámbito social variando la forma en la que convivimos, por ejemplo. Los temas Ovnis, las conspiraciones, las profecías y los contenidos paranormales han tomado fuerzas en estos meses, y no por meros rumores o historias, sino por testimonios físicos y audiovisuales que se han mantenido como pruebas. La presente historia se hizo viral a finales del pasado año, pero esta es un poco anterior. Aquí sabrás los detalles sobre este suceso viral.


A mediados del mes de junio de 2018, un joven que en aquel entonces tenía 22 años, llamado Isaac López, originario de Piedras Negras, en Coahuila, una ciudad fronteriza del noreste de México, tuvo una experiencia aterradora y paranormal. Algo insólito, perturbador y posiblemente antiguo que acecha en las noches.


El viernes 29 de junio, a las 6:08 de la tarde, Isaac junto con sus dos primos llegaron al rancho de su abuelo Francisco, el cual se ubica sobre la carretera Acuña a la altura del ejido El Moral. Tenían la idea de quedarse hasta el domingo en la tarde. El lugar tenía todas las comodidades para ellos, pero ellos querían dormir afuera los ocho primos como hacían de niños en el terreno tan extenso que poseía la propiedad. Así pues, lo primero que hicieron fue armar unas tiendas de campaña. Ya listas, pusieron unas cervezas en hielo, mientras uno de los primos preparaba la carne e Isaac y su otro primo iban a buscar leña en la parte trasera del rancho.


Por la parte delantera del rancho había una pequeña área de juegos que lo componía un columpio, un trampolín, un tobogán y unas porterías de futbol, por la parte de atrás habían acumulados de madera y, más allá, un pequeño camino que llevaba directamente a un río. De pequeño, Isaac iba mucho al río con su familia, eran momentos únicos y divertidos pero con el pasar de los años, transitar por el camino hacia el monte lo hacía sentir raro. El hecho de estar solo y con todo en silencio al alrededor, le generaba una sensación de miedo desde que vio la película de The Blair Wich Project (1999).


Mientras Isaac buscaba la leña junto a su primo, la sensación de miedo le regresó al encontrar cerca de ellos unas ramas amarradas con un alambre oxidado formando una cruz. Después de observarlas detenidamente, el chico se las mostró a su primo, el cual poseía otra en sus manos. Eran más pequeñas y parecían tomar la forma de un pequeño muñeco vudú. Su primo la había obtenido después de sacar pedazos de madera, se encontraba entre la leña. Isaac se encontraba inquieto, pero trató de darle alguna razón de ello diciéndole a su primo que seguramente el abuelo había hecho esas figuras de ramas para pasar el tiempo y simplemente las dejó allí.


La noche pasó muy rápido en donde se unieron sus cinco primos. Todo estaba tranquilo y los primos comieron, cantaron y bebieron. Sin notarlo, se hicieron las 1:40 de la mañana. El frío se hizo presente y tres de los ocho primos no aguantaron la temperatura y se fueron a dormir a la casa del abuelo. Los otros cinco restantes se quedaron ahí simplemente hablando hasta que la conversación cambió para contar historias de terror. Isaac mencionó que era difícil de imaginar que tantas cosas paranormales ocurrieran en lugares tan apartados, más aun de noche y muchos ni lo notaban. Uno de los primos mayores señaló que una vez, cuando se encontraba junto a su padre pescando en el cercano río al rancho, los asustaron a ambos. Dijo que mientras se encontraban a las orillas del río, unos gritos aterradores sonaron entre el denso monte, gritos que se convirtieron en risas desenfrenadas. Las risas tomaron un cambio repentino de nuevo para convertirse en un llanto que terminó maldiciéndolos.


Isaac sintió miedo, podría ser porque se encontraban cerca de allí o porque anteriormente habían encontrado las figuras de ramas, o porque justamente ese día por la mañana irían a ese preciso lugar a pescar. Paso un instante e Isaac dijo que dormiría, no debían de levantarse tan tarde. Todos lo siguieron. Isaac durmió con un primo mientras que los otros tres se quedaron en otra tienda de campaña. Como a las 3:15 de la mañana, Isaac se levantó a orinar y no se puso sus lentes, solo salió de la tienda. Se dirigió a la parte delantera de la casa, muy cerca del automóvil en donde habían llegado al rancho y orinó junto a él. Cerca de la carretera se escuchaba como pasaban los carros por ella, además de los sonidos típicos del lugar, entre ellos los mugidos de las vacas, los cantos de los gallos, los relinchidos de los caballos, etc.


Al terminar, Isaac volteó la cabeza y sus ojos divisaron de manera muy borrosa, en el columpio, algo sentado moviéndose. El chico pensó que era alguno de sus primos hablando con su novia por celular, así que caminó de nuevo a la tienda de campaña. Justo cuando se acomodaba para dormir nuevamente, escuchó un balido de cabra muy cerca. Isaac se quedó un momento escuchando y poco a poco fue testigo de cómo el sonido cambiaba a ser un sonido de desespero, como de sufrimiento. La cabra comenzó a gritar de dolor. Los siete primos parecían estar muy ebrios y con el sueño muy profundo para no notar el ruido que ya había. El joven se puso los lentes y abrió la tienda de campaña para asomarse. Lo que el joven Isaac vio fue lo más irreal y aterrador que le tocó ver en su vida.


La cabra se encontraba justamente en donde el chico había orinado, caminando, como si estuviera oliendo la tierra húmeda. Isaac tomó un cigarro y salió de la tienda para saber el porqué del sonido. La cabra caminó hacía el área de juegos, y de pronto comenzó a correr como si algo la persiguiera, de la nada se detuvo, para volver a caminar. La sorpresa del joven fue que no corrió como un animal lo haría normalmente sino que se levantó y lo hizo en dos patas para subirse al columpio. La cabra comenzó a mecerse y gritaba como si la estuvieran matando, sonidos terribles sufrimiento. Isaac quedó en shock pero le permitió correr para despertar a su primo, el que dormía en la tienda de campaña con él.


Ambos estaban asustados e impactados por lo que veían. Observaban con temor como una cabra se encontraba meciéndose en un columpio haciendo desesperantes sonidos de angustia para luego reírse desenfrenadamente haciendo un sonido chirriante, repetitivo y aterrador. Mientras se encontraba allí, no los miró, no volteaba a verlos pero la luna brillaba tanto que los espectadores podían ver como el perturbador animal movía sus patas traseras, mientras se sostenía con las delanteras del columpio.


Isaac no aguantó el nefasto panorama y vomitó. Vomitó del miedo. Pronto, la cabra brincó del columpio y comenzó a dar sonidos lastimeros nuevamente. El chico no aguantó más y corrió a la casa de su abuelo Francisco, el cual se encontraba en la puerta con una carabina de postas en sus manos. El hombre se encontraba pálido y temblando, al igual que el chico. El abuelo abrazó a su nieto con gran fuerza y le dijo, con una voz llorosa y entrecortada, algo que le heló la sangre: "La había escuchado hablar, pero nunca... nunca la había visto caminar en dos patas... Ni hacer lo que hizo."


Pasaron unos minutos e Isaac salió corriendo silenciosamente de la casa hacia las tiendas de campaña para levantar a sus primos. Una vez despiertos, les dijo que su abuelo se sentía mal y que era mejor estar dentro de la casa. En ese momento solo podía escucharse el rechinido del columpio y los balidos normales de la cabra. Una vez todos dentro, ellos continuaron durmiendo, a excepción de Isaac y su primo, los cuales habían sido testigos de todo lo ocurrido. En ese transcurso de la madrugada, ambos no pudieron dormir, por lo que salieron a la sala, donde encontraron al abuelo Francisco tomando café.


El hombre no aguantó más y comenzó a llorar desconsoladamente. Ambos nietos se acercaron a su abuelo e Isaac le tocó el hombro preguntándole que ocurría. El abuelo solo respondió que solo era miedo, miedo de verla caminar así, como si fuera una persona. Isaac le dijo que estaban bien, que no pasaba nada pero fue interrumpido por el hombre diciendo: "¿Saben? La otra noche tocaron a mi puerta. Tocaron muy fuerte y gritaron PANCHO, PANCHO.ABREME LA PUERTA. ABRE QUE HACE FRÍO. Yo quede congelado del miedo porque en tono burlón, era la voz de abuela."


Isaac y su primo quedaron petrificados del miedo porque, además de que es muy raro que alguien toque la puerta del rancho de su abuelo porque deben de pasar cuatro portones cerrados para llegar a la casa, porque es un lugar aislado, la abuela de los chicos falleció en marzo del año 2011.


Después de lo ocurrido, Isaac no volvió a ir al rancho del abuelo, y no creo que piense en hacerlo de nuevo. El solo hecho de rememorar ese momento en donde una cabra que caminaba muy desenvueltamente en dos patas, montada en un columpio, sentada y emitiendo sonidos humanos desde gritos desesperados hasta risas desenfrenada, es algo que causa impresión, terror y trauma. 


Dicha leyenda es conocida como "La Cabra que Ríe por las Noches" y, en muchos sectores rurales del estado, cuentan que en las extensiones más boscosas se aparece una cabra erguida en dos patas en las noches más oscuras de luna llena. Se dice que se les aparece a los campistas y conductores con automóviles averiados. Lo recomendable es que si se llega a ver, que no se le preste atención y no se le hable. Se aparece en medio de la oscuridad, observando con la mirada fija. Dicen que tiene la capacidad de imitar muy bien sonidos y voces humanas y que su mera aparición tiene que ver son demonios.

viernes, 4 de diciembre de 2020

La apariencia verdadera de los Ángeles

¿Te has preguntado alguna vez como lucen los Ángeles? ¿Cuál es su apariencia real? Quizás no, tomando en cuenta como los muestran en ilustraciones y películas. Básicamente son como humanos, pero de gran e incomparable belleza que irradian luz y paz, teniendo unas enormes alas blancas. Así se se les manifiesta en la mayoría de los casos, pero ¿Qué tal si te dijera que no todos los ángeles tienen ésta manifestación? ¿Qué pensarías si te dijera que algunos ángeles tienen una apariencia aterradora y confusa? Aquí y ahora sabrás un poco más sobre los Ángeles; sus jerarquías, sus poderes y sus formas físicas.

Antes de profundizar en el tema, hablemos de la Angelología Cristiana que es la parte de la teología sistemática que estudia las características, oficios y alcances de los Ángeles. Los Ángeles (mal’ak y מַלְאָ֔ךְ en hebreo y angelos o ἄγγελος en griego), significa Mensajero y son seres espirituales creados por Dios. Es importante acotar que, al ser seres creados, no deben recibir adoración. En la Biblia se menciona en repetidas ocasiones la actividad de estos seres, más no explica lo que son en realidad, solo da por sentadas su existencia y acciones. Pero se sabe que los Ángeles son una compañía y no una raza, ellos fueron creados todos al mismo tiempo, hay un centenares de millones y no hay propagación entre ellos; no mueren por lo tanto no hay un incremento o decrecimiento en su número. No son criaturas individuales verdaderas, tanto finitas como espaciales, se encuentra en una relación más libre con el tiempo y el espacio que el hombre. Muchos pueden estar presentes al mismo tiempo en un espacio limitado, más no son omnipresentes. Ellos no son corpóreos, no tienen cuerpo como el ser humano. Se dice que son espíritus, con juicio moral y alta inteligencia.

Pseudo Dionisio Areopagita, un teólogo, filósofo, escritor y místico bizantino, tras sus estudios bíblicos, estableció en su tratado "De la Jerarquía Celeste", que fue introducido en Occidente por el Papa Gregorio Magno (Gregorio I o también San Gregorio, el sexagésimo cuarto papa de la Iglesia católica) y traducido al latín en el siglo IX por el filósofo del renacimiento carolingio, Juan Escoto Erígena, en el año 870, que los Ángeles se dividen en tres jerarquías, también llamadas esferas o tríadas y cada una de estas se subdivide en tres órdenes o coros. Esto nos da un resultado de nueve tipos de Ángeles, en contraposición a la cábala judía que nos habla de diez rangos de seres angelicales.

La Primera Jerarquía se consideran como Consejeros Divinos, y en sus tres órdenes se encuentran: Los Serafines, Los Querubines y Los Tronos.

Los Serafines

Cuyo significado quiere decir "Seres Incandescentes". Los que se encuentran en la categoría más alta. Ellos se encuentran al lado del trono de Dios y sirven directamente a él adorando y clamando el trisagio hebreo (himnos en honor a la Santísima Trinidad): «Santo, santo, santo es el Señor Todopoderoso; toda la tierra está llena de su gloria» (Isaías 6:3). Su función es cantar alabanzas y ayudar a regular el movimiento de los cielos, también son los encargados de trabajar con la energía divina, despertando el amor en los seres humanos. Su voz es bella y melodiosa. 

Son de color rojo y poseen tres pares de alas (seis alas) con ojos en ellas: con dos cubrían sus rostros, ya que al ser los seres más bellos del universo, solo Dios tiene derecho a contemplarlos, con otras dos cubrían sus pies y con dos volaban. Se cubren para protegerse del intenso resplandor que emite Dios.

Los Querubines

Cuyo significado quiere decir "Llenos de Sabiduría". Ellos son los guardianes de la luz y las estrellas, pero también custodian todo aquello que se les encargue. Una de sus tareas iniciales fue la guardar la entrada del huerto del Edén (Génesis 3:24), del Arca de la Alianza (Éxodo 25: 22) y, por extensión, de los santuarios de los templos. Frecuentemente se dice que Dios mismo tiene su trono entre Querubines y que viaja montado en ellos (Salmos 18: 10; Ezequiel 10: 1-22). Su función es despertar la inteligencia de los seres humanos, tocando sus vidas a través de la luz de Dios. 

Tienen la apariencia de las representaciones más poderosas de varias criaturas del creador (bestias salvajes como leones y toros, animales domésticos como caballos, aves grandes como águilas y seres humanos). Luzbel (luz bella) era uno de ellos, siendo llamado "Portador de la luz", siendo el hijo pródigo de Dios antes de su posterior caída. Son azules y poseen dos pares de alas (cuatro alas). Se les menciona en (Ezequiel 1:5 y Apocalipsis 4:6-7).

Los Tronos

Son también llamados Ofanim y son los constructores ya que forman el orden universal y llevan el trono de Dios. Nunca duermen y son descritos como cuatro ruedas entrelazadas con otras, con bordes cubiertos de ojos. Proclaman la verdad y llevan el el registro de las acciones de los humanos. 

A los discípulos de Jesucristo, a los llamados apóstoles del cordero se les ofrecen doce tronos para gobernar. De manera que son niveles de reyes sobre los hombres. Sus alas son circulares y poseen los colores del arco iris. Son llamados "los que tienen muchos ojos" en El Libro de Enoc (Capítulo 20:1).

La Segunda Jerarquía se consideran como Mandos Intermedios que gobiernan los Cielos, son los que poseen la apariencia más humana y en sus tres órdenes se encuentran: Las Dominaciones, Las Virtudes y Las Potestades.

Las Dominaciones

Son los encargados de regular el orden y su función es ejercer como sanadores tanto físico y mental. Supervisan a los Ángeles inferiores y reciben órdenes de sus jefes directos; Los Serafines y Los Querubines. Se les atribuye los milagros médicos, transmutando todo lo enfermo en sano. En casos meramente extraordinarios, se manifiestan en el plano físico, pudiendo ser vistos por los humanos.

Las Virtudes

Se encargan de inspirar a la humanidad en grupos, trabajando con la sabiduría. Pueden realizar  milagros y obrar en temas que parecen imposibles. Se representan como rayos luminosos.

Las Potestades

Son los Guerreros de Dios. Un ejercito de Ángeles representados con armaduras. Se encargan de los nacimientos y las muertes de los hombres, así como de la conciencia y la historia. Se les invoca para luchar contra entidades y pensamientos negativos. Buscan la luz en los planos astrales más densos.  

La Tercera Jerarquía se consideran como Mensajeros Divinos y son los encargados de las relaciones con los humanos, y en sus tres órdenes se encuentran: Los Principados, Los Arcángeles y Los Ángeles.

Los Principados

Su nombre viene de "Príncipe" y como tal, deben de liderar, proteger y guiar. Son los encargados de custodiar las naciones y países. Como guardianes de áreas terrestres, supervisan y guían todos los temas que afecten. Rigen los reinos y que éstos se mantengan en el orden divino.  

Los Arcángeles

Son los intermediarios más importantes entre los seres humanos y Dios. Están a cargo de llevar los decretos divinos y misiones importantes para ayudar en todo lo que relacione el esfuerzo de los hombres. Son los mediadores entre los mandos superiores y los Ángeles. Son líderes de los seres celestiales. La Biblia indica que hay siete Arcángeles, pero solo menciona el nombre de tres que son los reconocidos por la Iglesia Católico: Miguel, el que posee más poder y autoridad (Judas 9; Revelación 12:7), Rafael (en el libro de Tobías) y Gabriel (en el libro de Daniel y en el evangelio según San Lucas).

Los Ángeles

Seres celestiales. Son los más próximos a los humanos a los que protegen, guían y transmiten mensajes. Son obreros del cielo ante cualquier tarea. Al tener una relación directa con los seres humanos, se encargan de instruirlos con mensajes del bien. Los Ángeles son portadores de la confianza en la misericordia divina. 

En La Biblia se mencionan a los Ángeles en cuarenta ocasiones, a Los Serafines y Los Arcángeles en dos, y de los Querubines en unas noventa ocasiones en el Antiguo Testamento. Es importante señalar algunos datos importantes sobre los Ángeles:

1. No todos los Ángeles son buenos, hay algunos que pecaron, convirtiéndose en malvados cuando se rebelaron contra Dios.

2. Los Ángeles no son inmortales. Aquellos que pecaron y abandonaron su camino al convertirse en malvados, perdieron su brillo, esencia y función, por lo que pueden ser aniquilados, incluyendo el Diablo, mientras, algunos están retenidos en prisiones oscuras y eternas hasta el gran día del juicio (Judas 5-8).

3. Cuando un ser humano fallece, no se convierte en un Ángel. Los Ángeles no son personas resucitadas. Son otro tipo de criaturas (Colosenses 1:16). Quienes resucitan en el cielo reciben el don divino de la inmortalidad (1 Corintios 15:53, 54). Además, ocuparán un puesto superior a los Ángeles (1 Corintios 6:3).

4. Los Ángeles no fueron creados para servir a los humanos. Ellos siguen las instrucciones de Dios, no las nuestras (Salmo 103:20, 21). El propio Jesús sabía que debía pedir ayuda a Dios y no a los Ángeles (Mateo 26:53).

5. No se les debe rezar a los Ángeles ya que orar es una forma de adoración, y solo se debe de adorar a Dios (Revelación 19:10). Cuando se reza, se debe de dirigir a Dios mediante Jesús (Juan 14:6).

El mundo angelical es más extenso de lo que imaginabas. Sin duda complejo e interesante. Cabe señalar que esta entrada es meramente de conocimiento general y no para provocar controversia, aunque es posible que cause una mejor interpretación ante lo plasmado en La Biblia, que en ciertos versículos, este conglomerado de celestiales se manifestaron ante los humanos, no como personas, sino como seres similares a entidades de otro mundo, cuyas primeras palabras que decían eran "No temáis"

Para afirmar dicho comentario, te dejo a continuación este fragmento en donde el sacerdote Ezequiel, hijo de Buzí, estando un día a orillas del río Quebar, en Babilonia, ve y describe como son Los Querubines y Los Tronos:

Entonces vi que del norte venía un viento huracanado; de una gran nube salía un fuego como de relámpagos, y a su alrededor había un fuerte resplandor. En medio del fuego brillaba algo semejante al metal bruñido, 5 y en el centro mismo había algo parecido a cuatro seres con aspecto humano. 6 Cada uno de ellos tenía cuatro caras y cuatro alas; 7 sus piernas eran rectas, con pezuñas como de becerro, y brillaban como bronce muy bruñido. 8-9 Además de sus cuatro caras y sus cuatro alas, aquellos seres tenían manos de hombre en sus cuatro costados, debajo de sus alas. Las alas se tocaban una con otra. Al andar no se volvían, sino que caminaban de frente. 10 Las caras de los cuatro seres tenían este aspecto: por delante, su cara era de hombre; por la derecha, de león; por la izquierda, de toro; y por detrás, de águila. 11 Las alas se extendían hacia arriba. Dos de ellas se tocaban entre sí, y con las otras dos se cubrían el cuerpo. 12 Todos caminaban de frente, no se volvían al andar. Iban en la dirección en que el poder de Dios los llevaba. 13 El aspecto de los seres era como de carbones encendidos, o como de algo parecido a antorchas que iban y venían en medio de ellos; el fuego era resplandeciente y de él salían relámpagos. 14 Los seres iban y venían rápidamente, como si fueran relámpagos.

15 Miré a aquellos seres y vi que en el suelo, junto a cada uno de ellos, había una rueda. 16 Las cuatro ruedas eran iguales y, por la manera en que estaban hechas, brillaban como el topacio. Parecía como si dentro de cada rueda hubiera otra rueda. 17 Podían avanzar en cualquiera de las cuatro direcciones, sin tener que volverse. 18 Vi que las cuatro ruedas tenían sus aros, y que alrededor estaban llenas de reflejos. 19 Cuando aquellos seres avanzaban, también avanzaban las ruedas con ellos, y cuando los seres se levantaban del suelo, también se levantaban las ruedas. 20 Los seres se movían en la dirección en que el poder de Dios los impulsaba, y las ruedas se levantaban junto con ellos, porque las ruedas eran parte viva de los seres. 21 Cuando los seres se movían, se movían también las ruedas; cuando ellos se detenían, las ruedas también se detenían, y cuando los seres se levantaban del suelo, también las ruedas se levantaban con ellos, porque las ruedas eran parte viva de los seres.

22 Por encima de sus cabezas se veía una especie de bóveda brillante como el cristal. 23 Debajo de la bóveda se extendían rectas las alas de aquellos seres, tocándose una con otra. Con dos de ellas se cubrían el cuerpo. 24 Y oí también el ruido que hacían las alas cuando avanzaban: era como el ruido del agua de un río crecido, como la voz del Todopoderoso, como el ruido de un gran ejército. Cuando se detenían, bajaban las alas.

I. Llamamiento del Profeta. (Ezequiel 1:1-24).

Ahora bien, te has preguntado ¿Cuál es el sonido de los Ángeles? Te lo dejo a continuación:

Espero que hayas disfrutado del sonido, y aunque suene "celestial" y extraño, no tiene nada que ver con Ángeles. La canción se llama 13 Angels Standing Guard 'round the Side of Your Bed, con una duración de siete minutos y veintidós segundos. Pertenece a He Has Left Us Alone but Shafts of Light Sometimes Grace the Corner of Our Rooms... álbum debut lanzado el 13 de marzo del año 2000 de la banda canadiense de post-rock Thee Silver Mt. Zion Memorial Orchestra. El álbum nació a partir de un deseo de Efrim Menuck, productor y vocalista de la banda, de grabar algo para su perra Wanda, que murió de cáncer mientras Godspeed You! Black Emperor estaba de gira.​ Menuck describió la grabación del disco como una "experiencia judaica", debido a su inmersión en una pequeña y amigable comunidad judía en Montreal.​ 

Al saber la verdad, muchos están de acuerdo en preferir la imagen típicamente clásica de los Ángeles que conocemos, algo más humanizado y agradable a la vista. Percepción que provino de algunos pintores y artistas que se tomaron libertades al retratar a los Ángeles, los cuales humanizaron más a estos seres al dibujarlos como humanos hermosos con alas, señal de que estas criaturas vivían en el cielo. Cabe mencionar que a los Arcángeles Miguel y Gabriel, aparte de darle las mencionadas características, se les dio ropa militar contemporánea. En el caso de Los Querubines, su cambio de imagen extremo se debió a los escultores del Renacimiento, quienes los representaron como bebés lindos bailando y jugando en las tumbas infantiles. 

Los Ángeles tocando arpas fue implementado por John Milton, poeta y ensayista inglés, que escribió Paradise Lost (El Paraíso Perdido), dicho poema clásico de la literatura inglesa que se encuentra dividido en doce libros y sobrepasa los diez mil versos escritos en rima, que es epopeya acerca del tema bíblico de la caída de Adán y Eva. El toque de arpas era sin duda algo bello y relajante de imaginar. 

La verdad es otra. Las formas de estos seres en las representaciones ante los seres humanos llegaba a ser aterradora y, encontrarte con alguno de ello podría causar un gran trauma y lo más seguro es que no pudieras dormir por el resto de tu vida.