Aprovechando el reciente estreno de la película Furiosa del visionario director australiano George Miller, es indicado mencionar que, entre su variado catálogo de filmes, uno en particular iba ser parte él pero que pocos saben que así iba a ser. Miller es considerado como uno de los mejores cineastas de acción de la época por la creación y dirección de Mad Max, cuya más reciente cinta llamada Fury Road ganó seis precios Oscar, de diez de las que estuvo nominada. Pero no todo es acción, ya que Miller realizó películas animadas y aventura como The Witches of Eastwick (1987), Babe (1995) y su secuela de 1998 y Happy Feet (2006) y su secuela de 2011, por mencionar algunas.
Es bien sabido que en la actualidad, no le ha ido bien al Universo Cinematográfico de DC Cómics con tantos filmes fallidos que no han gustado mucho al público y además de las bajas recaudaciones que ha tenido, sumado a la mala organización interna para estructurar un mejor universo compartido de tantos personajes. Es cierto que la jerarquía de poder del Universo DC estuvo a punto de cambiar, según Dwayne "The Rock" Johnson, pero ahora el cineasta James Gunn se encuentra en el liderazgo de DC Cómics y prepara su versión de Superman con The Man of Tomorrow, además de la continuación del caballero oscuro con Batman 2 de Matt Reeves. Pero mucho antes de todo eso, hubo un fallido proyecto que buscaba llevar a la gran pantalla al grupo de héroes, el cual tenía por título Justice League: Mortal e iba a ser dirigida por George Miller con un guión de Kieran y Michele Mulroney.
En febrero de 2007 se anunció que Warner Bros había contratado a Michele y Kieran Mulroney para escribir un guion para una película sobre la Liga de la Justicia. Las noticias surgieron al mismo tiempo que se anunció la cancelación del proyecto del director Joss Whedon basado en Wonder Woman y el de The Flash, que iba a ser escrito y dirigido por David S. Goyer. Luego de que se anunció que el proyecto se llamaría Justice League: Mortal, Michele y Kiernan Mulroney le entregaron su guion completo a Warner Bros. En Junio de 2007, gracias al cual recibieron criticas favorables, e hizo que el estudio comenzara rápidamente con la producción con la esperanza de comenzar a filmar en 2008, sin embargo la película quedó atrapada en medio de la famosa huelga de escritores de Hollywood entre los años 2007 y 2008. Warner Bros. tenía las esperanzas que Justice League: Mortal fuera el comienzo de una nueva franquicia cinematográfica, cuyas secuelas y spin-off se desarrollarían por separado del universo creado por Christopher Nolan con su versión realista de Batman.
Sin embargo, la huelga de escritores dio inicio el mismo mes que debía comenzar la producción lo cual obligo a Warner Bros. a retrasar la producción hasta febrero de 2008 cuando la huelga finalizó. Warner Bros. contactó a George Miller para la dirección y querían comenzar a filmar inmediatamente, pero la producción se vio retrasada por otros tres meses. Originalmente gran parte de Justice League: Mortal seria filmada en los estudios de Fox en Sydney, Australia junto a otras locaciones de las cercanías. La locación le dio a George Miller la posibilidad de reclutar actores australianos de nacimiento. El equipo de producción iba a estar compuesto enteramente por australianos, sin embargo el gobierno australiano le negó a Warner Bros. una rebaja del 40% de los impuestos por lo cual ellos no se sintieron en la necesidad de seguir contratando a más actores australianos. Miller se sintió frustrado ya que según él "esa era una oportunidad única en la vida para la industria fílmica australiana que se les escapaba de las manos por culpa de un pensamiento muy flojo. Ellos estaban diciéndole no a millones de dólares de inversión y grandes oportunidades de crear trabajos." La producción debió mudarse a los estudios de Vancouver, Canadá. Nuevamente la filmación fue retrasada hasta Julio de 2008, con la idea de lanzarla en el tercer trimestre de 2009.
Con retrasos continuos en la producción Miller finalmente decidió abandonar el proyecto, y el éxito en taquilla de The Dark Knight (2008), Warner Bros. decidió centrarse en el desarrollo de películas individuales para cada uno de sus héroes, permitiéndole a Christopher Nolan completar su trilogía con The Dark Knight Rises (2012). Gregory Noveck, vicepresidente principal de asuntos creativos para DC Entertainment declaró: "vamos a hacer una película de la Liga de la Justicia, sin importar si sea de acá a 10 años. Pero no lo haremos hasta que estemos seguros de que estamos haciendo lo correcto."
La película contaría con D. J. Cotrona como Superman, Armie Hammer como Batman, Common como John Stewart/Green Lantern, Megan Gale como Wonder Woman, Santiago Cabrera como Aquaman, Hugh Keays-Byrne como Martian Manhunter, Adam Brody como Barry Allen/Flash, Anton Yelchin como Wally West/Kid Flash, Stephen Tobolowsky como Alfred Pennyworth, Jay Baruchel como Maxwell Lord, Teresa Palmer como Talia Al' Ghul y Zoe Kazan como Iris West.
La cinta mostraría a un Batman desconfiado de los superhumanos y desarrollaría planes para derrotar a cada uno de ellos por si llegaban a salirse de control, para ello crearía el satélite Brother Eye para un monitoreo global de toda actividad. Por alguna falla en el sistema, el satélite quedaría propenso a ser hackeado y esta información valiosa caería en manos de los villanos de la película: Maxwell Lord, que sería despojado de esa información a la fuerza por La Liga de las Sombras y su líder, Thalia Al' Ghul, quien comenzaría a atacar a los héroes.
Los ataques continuos y mortales, forzaría a los héroes a unirse para derrotar a los villanos. Los enfrentamientos finales tomarían lugar en una base militar del gobierno que causaría tales estragos, que liberaría a una criatura prisionera a la que le hacían experimentos: Starro. Al final del fime se mostraría a la Liga de la Justicia ya formada luchando contra la gran y salvaje criatura, también cómo moría Barry Allen a manos de Starro y el nombramiento de Wally West como el nuevo Flash.
Se descubre también, en las escenas después de los créditos, que la falla en el sistema del satélite Brother Eye se debió a un intento de tomar control por parte del alienígena Braniac.
"Siempre he sido consciente del poder del mito. Son atemporales, en todas las culturas. Sus raíces se remontan a los griegos. Son mitos modernos y tienen un nuevo significado en el espíritu de la época."
George Miller
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