El mitológico Pontianak

A la fecha de hoy, 28 de octubre de 2021, faltan tres días para Halloween, la festividad de origen celta cuyo término del nombre es la abreviación de las frases "All Hallows Eve" o "All Hallows Evening" que significa, Víspera de Todos los Santos. Las calabazas decoradas, los dulces y los disfraces temáticos son las cosas más representativas de la víspera. Las figuras enmascaradas van desde personajes ficticios de películas de terror como asesinos seriales y zombies hasta personajes leyendarios como demonios, duendes, brujas, hombres lobo y vampiros. Sobre éste último en particular se trata la publicación de hoy, un tipo de vampiro mitológico llamado Pontianak.

Pontianak o también llamado Matianak o Boentianak (del holandés-indonesio) es un hantu (termino para referirse a "fantasma") con características vampiras de la mitología malaya e indonesia. Según la leyenda, se dice que la entidad nació cuando una mujer embaraza falleció durante al parto, al igual que su infante. Las malas condiciones del entorno, la envidia y un posible hechizo de por medio, hicieron que dicha mujer terminara muerta junto con su bebé. Su espíritu vengativo se convirtió en una entidad catalogada como un no-muerto, que vive entre el mundo físico y el mundo espiritual.

El nombre de este ser es una corrupción de la frase malaya "perempuan mati beranak", que se traduce como "aquella que ha muerto en el parto", aunque también dicen que es la combinación de Puan (Mujer), Mati (Morir) y Anak (Hijo). Es importante señalar que hay una ciudad indonesia llamada Pontianak Sultanato, fundada en 1771 y ubicada en los pantanos a lo largo de la costa oeste de Kalimantan, que lleva el nombre de esta horripilante criatura ya que Syarif Abdurrahman Alkadrie (1771-1808), primer sultán de la ciudad, informó que fue perseguido por el vengativo Pontianak cuando éste se estableció allí. 

Generalmente, el Pontianak suele tomar la apariencia de una mujer hermosa con la piel muy clara, el cabello muy largo, ojos brillantes, descalza y con un descuidado y andrajoso vestido blanco. Dicen que se le puede encontrar en lugares boscosos y pantanosos, lugares aislados para atraer a los hombres. Al estar en lugares alejados, la mujer gira los pies hacia atrás y toma vuelo entre la oscuridad, aterrizando en la copa de los árboles y haciendo sonidos aterradores para asustar a los hombres. 

Al estar los sujetos confundidos y asustados, el ente baja de los árboles con gran velocidad y mata a sus víctimas usando sus largas uñas para extirpar físicamente los órganos internos para su consumo. La sangre es bebida y lo que no devora lo deja a orilla de los ríos cercanos. Pero no solo ataca a los hombres solamente, también puede atacar a personas indefensas que se encuentren perdidas en su territorio durante la noche o que se encuentren lejos de su casa teniendo momentos de ocio.

Se dice que suele aparecer durante las noches en que sale la luna llena y típicamente anuncia su presencia a través de un tono agudo, suaves llantos de bebé o una risa femenina. Si las vocalizaciones son de bajo volumen, el Pontianak se encuentra cerca, pero si por el contrario son altas, significa que la criatura se encuentra lejos. Los perros son animales que pueden ayudar a saber si la terrible bestia se encuentra presente. Si el perro ladra o aulla durante la noche, indica que el Pontianak se encuentra lejos, pero si el perro se queja, quiere decir que la entidad llegó y pudo haber lastimado al animal. Otra forma de saber si el ser se encuentra cercano es el aroma de una fragancia floral seguida de un hedor similar al de un cadáver en descomposición.

La entidad localiza a su presa por el aroma de la ropa limpia recién lavada. Muchos malayos se niegan a dejar alguna prenda fuera de su casa durante la noche por esa razón. Muchas personas indefensas que han sido víctimas de a criatura se les ha abierto un agujero en la nuca y succionado la cabeza de ese modo.

Pero hay maneras de defenderse del Pontianak. Dicen los chamanes que se debe de clavar una estaca en la nuca del ente para paralizarla y luego introducirle un pequeño clavo justo debajo y retirar el objeto de madera para que esta se transforme en una mujer totalmente. Esta acción no acabara con la maldición, solamente le quitara la facultad de un no-muerto mientras el clavo se mantenga fijo en su nuca. Se cuenta que solo ha ocurrido en dos ocasiones y que con el tiempo el pequeño elemento metálico cederá del lugar y la mujer se convertirá en la criatura que es, escapando del lugar para alejarse y volver a su hábito oscuro y sanguinario.